Ciudad de Calamba (Filipinas). Del 29 de julio al 1 de agosto de 2024 se celebrará en el Centro de Espiritualidad Mornese de Pansol, Calamba City, Laguna, el encuentro de jóvenes de las Inspectorías de las Hijas de María Auxiliadora de la Conferencia Interprovincial de Asia Oriental (CIAO): Filipinas – Papúa Nueva Guinea, Hong Kong – Macao – Taiwán, Camboya – Myanmar, Vietnam, Corea del Sur – Mongolia, Japón, Tailandia, Timor Oriental – Indonesia.
“Jóvenes Soñadores : Potenciando los Sueños para un Mundo Justo y Sostenible” es el tema de las jornadas, que se inspiran en el Bicentenario del Sueño de Nueve Años, para alentar y empoderar a los jóvenes para que se conviertan en promotores de cambios positivos.
El campamento comenzó con un animado desfile de delegadas, que mostraron con orgullo sus trajes típicos, dando un tono de color y celebración al evento, adornado con la presencia de sor Runita Borja, FMA, Consejera general para la Pastoral Juvenil. La Inspectora de la Inspectoría St. Mary D. Mazzarello (FIL), Sor Teresita Padrón, dio una calurosa bienvenida a todas las participantes, incluyendo a la Inspectora de la Inspectoría Stella Matutina (KOR), a los Coordinadores de la Pastoral Juvenil, a las FMA, a los jóvenes, a los laicos colaboradores de la misión y al comité organizador de la Inspectoría FIL.
Sor Teresita enfatizó la importancia del Sueño de Don Bosco como piedra angular del carisma salesiano y recordó que el encuentro también pretende ser una respuesta concreta al llamado del Papa Francisco a cuidar y salvaguardar el planeta. Al reconocer el papel fundamental de los jóvenes en este desafío, expresó su gratitud a la Escuela CIAO, representada por Sor Cecilia Kim, SYM FMA FIL y a la Pastoral Juvenil, con la Coordinadora Sor María Victoria Sta. Ana, por su importante contribución al Youth Camp.
La ceremonia de apertura fue seguida por la Celebración Eucarística, presidida por el P. Eligio Cruz, Salesiano de Don Bosco de la Inspectoría de San Juan Bosco (FIN), quien en su homilía trazó un paralelismo entre la narración bíblica de Marta, María y Lázaro y las vidas de Don Bosco y Madre Mazzarello, destacando sueños y visiones comunes. Hizo preguntas inspiradoras a los jóvenes, animándolos a reflexionar sobre sus aspiraciones, las influencias que los han formado y el papel de la familia, de la que evidencio su apoyo inestimable en la realización de sus sueños. Instó a los jóvenes a perseverar en su compromiso, asegurándoles la importancia del trabajo y la oración constantes y motivándolos a abrazar sus sueños con valentía y determinación.
Después de la Santa Misa, en su discurso sobre “El sueño de Don Bosco y el protagonismo juvenil”, Don Eligio invitó a los jóvenes a emprender un viaje para descubrir la relevancia de la visión de Don Bosco, un sueño concebido hace dos siglos, en su vida cotidiana. Empoderó a los jóvenes de toda Asia y el Pacífico, mirándolos como protagonistas activos del legado de Don Bosco y comparándolos con corderos destinados a la santidad. Este era el deseo de Don Bosco: cultivar jóvenes líderes que animaran y acompañaran a sus compañeros hacia la santidad.
Basándose en la profunda sabiduría de las Escrituras, el P. Eligio destacó la importancia de la llamada personal de Dios para moldear el camino de liderazgo de cada individuo. Destacó la importancia de la fe y el amor incondicional como fundamento del liderazgo de servicio, y alentó a los jóvenes líderes a interiorizar estos valores y extenderlos a sus propios compañeros, promoviendo una comunidad compasiva y atenta.
Para estimular y desafiar aún más a los jóvenes, el P. Eligio compartió las profundas reflexiones de los sucesores de Don Bosco, el Cardenal Ángel Fernández Artime y Pascual Chávez Villanueva. Sus palabras son poderosos impulsores para afirmar el potencial de los jóvenes y su papel decisivo en la construcción de un mundo mejor.
Fotos y videos: Salesian Youth Movement FMA – FIL
