Cachoeira do Campo (Brasil). Los días  3 y 4 de octubre de 2024  se celebró en la Casa Retiro das Rosas en Cachoeira do Campo, Minas Gerais, la Asamblea Anual de Gestión Estratégica, que reunió a los responsables de las Presencias Educativas, Socioeducativas y Misiones Indígenas de la  Inspectoría Madre Mazzarello (BMM), para reflexionar juntos sobre el presente y el futuro de la educación salesiana.

El tema “Juntos por el presente y el futuro de la educación salesiana en BMM a la luz de la ESA V y el acompañamiento de las unidades educativas y socioeducativas” guió las reflexiones, caracterizadas por el análisis en profundidad, el intercambio de experiencias y la inevitable alegría salesiana. El evento fue una hermosa oportunidad para fortalecer el vínculo entre las presencias salesianas en un clima de diálogo, intercambio y sinodalidad.

El primer día de la Asamblea, titulado “Escuchar la realidad”, comenzó con un momento de oración, para preparar los corazones y las mentes para la escucha. El discurso de apertura, pronunciado por el P. Sérgio Augusto Baldin Jr, Director Ejecutivo de la Red Salesiana Brasil, ofreció una reflexión precisa sobre los “Horizontes contemporáneos de la pedagogía salesiana a la luz de la ESA V”, destacando los desafíos y oportunidades en el campo de la educación salesiana en el mundo actual.

Siguiendo esta línea de pensamiento, se presentó el escenario de la Inspectoría BMM, aportando una amplia visión de la realidad vivida por las obras salesianas. A continuación, Sor Ana María Cordeiro, Coordinadora Inspectorial para la Pastoral Juvenil, destacó la importancia del liderazgo pastoral y de la identidad salesiana en el contexto actual.

Por la tarde, se reflexionó sobre los desafíos y las perspectivas de los líderes salesianos frente a la situación de los jóvenes. El intercambio de ideas y la búsqueda de soluciones comunes culminaron con la celebración eucarística, presidida por el padre Sergio. La velada terminó con las Buenas Noches de la Inspectora de BMM, sor Teresinha Ambrosim, que presentó el programa de las celebraciones en vista del 150º aniversario de la primera expedición misionera de las FMA, que tuvo lugar el 14 de noviembre de 1877.

El segundo día, “Tejiendo caminos del futuro”, comenzó con una Celebración de la Palabra, seguida de la intervención del Consultor de Educación de BMM, Cristiano Prates, sobre el tema “Confianza relacional: una clave para transformar las escuelas y las obras sociales”. El ponente destacó la importancia de la confianza en las relaciones entre educadores y estudiantes como base para la transformación y el crecimiento de las instituciones.

A continuación, Cícero Albuquerque, Coordinador de Comunicación de la Inspectoría, presentó una perspectiva innovadora sobre “Educomunicación y Territorio en el Aprendizaje a lo Largo de la Vida”, haciendo hincapié en cómo la comunicación puede ser una herramienta de transformación dentro y fuera de las escuelas, creando redes de aprendizaje que tengan un impacto positivo en la vida de los jóvenes.

También estuvo presente en la Asamblea Anderson Leal, Gerente Educativo de la Red Salesiana Brasil, quien presentó un escenario de mercado a través del tema “Caminos de excelencia: lo que hace que nuestra red sea única”. Anderson compartió varias estadísticas útiles para tener un enfoque más estratégico, basado en datos reales, para que la toma de decisiones pueda ser más eficiente y asertiva.

Maria Imaculada da Silva, Referente FMA de la sección ACSSA (Asociación de Estudiosos de la Historia Salesiana) – Brasil, ofreció a continuación una reseña histórica de la Asociación y de las últimas deliberaciones durante la Asamblea celebrada en septiembre, reafirmando el compromiso como Congregación y Red de mantener viva y presente la memoria y la historia salesiana en todo el mundo, especialmente en Brasil.

La tarde se dedicó al trabajo en grupo, guiado por Sor Amélia de Assis Castro y Cristiano Prates, que acompañaron al grupo de Escuelas, y por Sor Dircione Amorim, Coordinadora Inspectorial para la Acción Social, que dirigió el grupo de Obras Sociales. Estas dinámicas han permitido a los responsables pensar en formas concretas, adecuadas a la realidad de cada obra, para construir un futuro promisorio. El momento final, por la noche, se caracterizó por un clima de esperanza y deseo de renovación.

Durante las jornadas, además de los momentos formativos, los participantes tuvieron momentos de pausa que permitieron estrechar los lazos entre las diferentes presencias salesianas de la Inspectoría. La puesta en común de experiencias y el intercambio de buenas prácticas enriquecieron aún más las jornadas, fortaleciendo el sentido de unidad y pertenencia.

Don Bosco y Madre Mazzarello siguen estando presentes como guías en cada paso de este camino, inspirando y fortaleciendo los corazones salesianos. La Asamblea no solo fue un espacio para reflexionar sobre el presente, sino también para construir un futuro de esperanza y compromiso con la educación integral de los jóvenes.

Foto: Inspectoría BMM

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