Macerata (Italia). El 3 de septiembre de 2022 en Macerata, en Italia, las Hijas de María Auxiliadora de la Inspectoría Romana San Giovanni Bosco (IRO) abrieron la Comunidad Madonna di Loreto, comprendida en el proyecto de una nueva realidad Educativa Pastoral en colaboración con los Salesianos de Don Bosco y los laicos.
En esta jornada de fiesta estaban presentes la Vicaria General del Instituto de las FMA, sor María del Rosario García Ribas, la Inspectora de la Inspectoría IRO, sor Gabriella Garofoli, las Novicias de los Noviciados internacionales de Roma y Castelgandolfo, numerosas FMA provenientes de diversas Casas de la Inspectoría, recibidas por el Inspector de la Circunscripción salesiana Sacro Cuore de Italia Central, don Stefano Aspettati, el Director de la Obra de Macerata, don Francesco Paolo Galante y por varios Salesianos y miembros de la Familia Salesiana, que desde hace tiempo han deseado y soñado con esta nueva realidad.
Desde 2015, en efecto, la Inspectoría IRO ha estado trabajando para dar una señal de futuro y de esperanza y una respuesta concreta al deseo de colaboración y de compartición con los Salesianos de Don Bosco con toda la Familia Salesiana de las Marcas. Se han interrogado sobre las posibles nuevas formas que una Comunidad Educativa podría asumir para recibir el vino nuevo que el Señor quiere dar aún hoy a un territorio y a una juventud herida de una manera distinta a la del pasado.
Gradualmente, el deseo se ha concretado con la opción de dar vida a una Comunidad Educativa Pastoral formada por adultos y jóvenes, consagrados y laicos, hombres y mujeres, para ofrecer a los jóvenes una Familia en la que crecer y una cultura de la Comunión y del Don, dentro de una experiencia de Espiritualidad Salesiana.
Faltaba aún la presencia estable de una Comunidad FMA, que se concretó el 3 de septiembre de 2022, en el 150º Aniversario de la Fundación del Instituto FMA.
La Celebración Eucaristica, centro de la Jornada, estuvo presidida por el Obispo de Macerata, Mons. Nazzareno Marconi que, en la homilía, con sencillez y fraternidad, subrayó la importancia de ser presencia que da vida a fin de abrir las puertas a un futuro para construir juntos, en la alegría, rodeados del Espíritu que hará posible incluso lo que aparentemente parece imposible.
Al final de la Celebración, el Inspector entregó las llaves de la casa a la Inspectora, que a su vez las entregó a la nueva Directora de la Comunidad. Ésta, como subrayó sor Gabriella Garofoli, tendrá las puertas siempre abiertas para todo aquel que llame y quiera entrar.
Junto a ella, la Comunidad recibió el Proyecto Educativo Pastoral de la Obra y dos iconos que representan a Nuestra Señora de Loreto, a quien se le confía, y a Nuestra Señora de la Misericordia, protectora de la ciudad.
Sor María del Rosario García Ribas saludó y dio las gracias después a todos los presentes en nombre de la Madre Generale, sor Chiara Cazzuola, de visita en la India con ocasión del 100º de la presencia FMA, y repitió que “con esta apertura valiente la Inspectoría Romana ‘San Giovanni Bosco’ quiere subrayar su deseo de continuar respondiendo a las profundas expectativas de las jóvenes y de los jóvenes; quiere concretar el deseo de ser presencia en medio de ellos, de acompañarlos generando siempre vida, Como Don Bosco y Madre Mazzarello”.
En la conclusión de la Celebración, todos estuvieron invitados a entrar, para participar en la bendición y en la inauguración de la porción del inmueble propiedad de los Salesianos denominada “Villa Verde”, reestructurada después de los daños causados por el último terremoto, y para visitar los ambientes destinados a la nueva Comunidad. Fue muy apreciada la Capilla, por el cuidado y la sencillez con que ha sido puesta a punto: en su estructura hace ya imaginar la belleza de la oración cotidiana en común.
El almuerzo vivido en fraternidad dio fin a la experiencia de una jornada que es sólo el inicio de una aventura deseada desde hace tiempo y que aún está toda para escribir por sor Ilaria Balducci, Directora de la Comunidad, y por sor Adele Brugnoni y sor Franceschina Giancola, por los hermanos SDB y por la Comunidad Educativa completa, que estará acompañada por la palabra “INSIEME” (juntos), el único camino posible para configurar la nueva experiencia Pastoral salesiana de la Obra de Macerata.
Un laico de Macerata, vecino a la Obra salesiana, por la tarde escribió a la Inspectora para darle las gracias:
“Bellísima jornada, momento emocionante, cargado de esperanza y de belleza, vivido con alegría. Gracias a usted, por su opción, y a toda la Familia Salesiana por este gran don hecho a nuestra tierra: esto demuestra que el Señor está presente y continúa mandando obreros a su mies.
Sembrad en la estela de la historia la esperanza y la alegría de Cristo Resucitado que está en vuestro corazón, visible en vuestros rostros, gozosos, sonrientes, acogedores y abiertos a las relaciones. El Espíritu Santo os ilumine el camino, María Auxiliadora y San Juan Bosco os guíen en vuestro recorrido. Estamos cerca, rezaremos al Señor para que esta semilla germine y dé mucho fruto”.
