Roma (Italia). El 31 de mayo de 2023 en Roma, en la Casa General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, se llevó a cabo el Curso de Formación Permanente para Misioneras ad gentes sobre el tema “Con María ser ‘presencia’ generadora de vida” (Actas CG XXIV), en el que participaron 13 misioneras de todo el mundo, con escalas en Mornese, Niza, Turín. El grupo de nuevas misioneras, que están terminando el año de preparación y formación para la misión ad gentes ha sido entrevistado.
1- ¿Cuáles son las experiencias más hermosas de su vida misionera?
(Sor María Remedos ECU) “Un sábado por la tarde iba a un pueblo de la etnia Shuar, para la catequesis; llovía mucho y faltaba un señor que vivía lejos del lugar donde nos habíamos reunido. Así que decidí ir a buscarlo, pero tenía que cruzar un río cuyo vado subía. De todos modos, quise ir a buscar a este señor y me puse en marcha, saliendo del pueblo. Una niña pequeña se paró frente a mí impidiéndome continuar y regresé. Cuando llegué al lugar de reunión, todos lloraban porque creían que estaba muerta y ya habían alertado a los hombres para que me buscaran por el río. ¡Nuestra Señora realmente me salvó!”.
(Sor Ángela ANT) “Me encontraba en el sur de la República Dominicana, en los años 1980-1990, y en ese momento la población estaba totalmente abandonada por el gobierno y la Iglesia por la falta de sacerdotes. Las FMA con los Salesianos hemos tratado de ayudar a la gente, tanto desde el punto de vista material como desde el punto de vista de la animación espiritual (en varias circunstancias también he bendecido funerales). Esos años fueron años de gran precariedad material, incluso para nosotras las hermanas y el pueblo compartía lo que tenía con nosotras. Me conmovió mucho el agradecimiento de una ex alumna que vivía en los Estados Unidos que al enterarse de esta situación vino y llevó alimentos para 24 familias durante 1 mes. La gente estaba muy agradecida con esta señora”.
2- ¿Cuál es el secreto para integrarse bien en la misión?
(Sor Pilar ANT) “En el sur de la República Dominicana, donde estuve en los años 1990-2000, la gente era muy pobre. Las personas siempre deben ser amadas y en determinadas situaciones las hermanas deben hacer de todo: la esperanza de la promoción y educación de las niñas estaba puesta en nosotras FMA. Es necesario ser Hijas de María Auxiliadora donde el Señor te pide estar y sentirte en casa”.
(Sor Norma MDG) “El secreto está en ‘desvestirse’ de la propia cultura para dejar espacio y acoger con amor la nueva cultura en la que uno se inserta. Debemos amar la cultura con sus propias tradiciones y ritos; entrar de puntillas con mucho respeto por la dignidad de cada persona, de todas las personas, del pueblo, a pesar de las dificultades para aprender el idioma”.
3- ¿Cómo has afrontado las dificultades que encontraste en tu misión?
(Sor Maria Fe TIN) “Cuando llegamos a Timor Oriental había dificultades dentro del país; entramos aprendiendo el idioma. Fue muy difícil, porque la gente no habla mucho inglés. Trajimos un cuaderno con nosotros para escribir las palabras. El primer paso para entrar en el corazón de las personas es aprender el idioma y caminar con ellas compartiendo momentos de sufrimiento, persecución y violencia. Nos quedamos con la gente y con ellos tuvimos la experiencia de estar bajo la Cruz: en muchas ocasiones experimentamos la ayuda poderosa de la Virgen Auxiliadora”.
(Sor Teresita GIA) “Encontré las dificultades sobre todo antes de partir para la misión, porque no había hecho petición misionera, pero la Inspectora me pidió esta obediencia: tenía miedo por mi frágil salud, por el idioma, que no me insertara. Entonces me dije: ‘a pesar de toda esta resistencia voy a hacer la voluntad de Dios’. Llegada a la misión no he tenido enfermedades, el idioma es muy difícil, pero gracias a la fe superé las dificultades. El 3 de diciembre, en la fiesta de San Francisco Javier, patrón de las misiones, solicité una misión. ¡Soy una feliz FMA misionera!”.
4- ¿Qué te esperas de los nuevas misioneras que llegan en misión?
(Un poco todas las misioneras) “Las nuevas misioneras que llegan en misión no deben pensar que van a salvar el mundo; tienen que dar lo mejor de sí y aceptar la realidad tal como es. No van a revolucionar nada, lo importante es estar disponibles como el pañuelo de Don Bosco para ser enviadas donde Dios las mande a través de las Superioras. Queremos que sean mujeres maduras, listas para todo el trabajo y para encontrar a Jesús en cada persona. No deben olvidar que la misión es de Dios y Jesús y María nos preceden. VAMOS ADELANTE con valentía y serenidad. Dios está obrando y nosotras, junto con las hermanas de la Comunidad en la que estamos insertas, seguimos las huellas de tantas misioneras que dieron todo por la misión”.
Las nuevas misioneras expresaron así su gratitud a las hermanas:
Gracias, queridas hermanas, por vuestro testimonio de vida totalmente entregada gratuitamente al pueblo, a tantos jóvenes encontrados en el camino de vuestra misión. Gracias por el testimonio de fe que nos habéis regalado, por vuestra mirada profunda y la capacidad de ‘descifrar’ la vida en vuestro peregrinar perenne junto a cada persona. ¡Gracias por vuestra humanidad que ha asumido todo: alegría, lágrimas, preocupaciones, proyectos y esperanzas y por vuestra vida, que es un canto de alegría y alabanza al Dios de la Vida!
Gratidão as neos missionarias pela entrega em ser portadoras do amor de Deus Pai, junto as as famílias, priorizando as crianças, adolescentes e jovens mais necessitados nas culturas diferentes. Para elas nossa prece como apoio fratenal.
Me encanta leer estas crónicas ,gracias Hermanas misioneras Adgentes, su testimonio impulsa mi respuesta de cada día al Señor en esta realidad que vivo. Subrayo la importancia que debemos darle a una actitud interior permanente de disponibilidad al proyecto de Dios