Belo Horizonte (Brasil). En julio de 2024, la Inspectoría brasileña Madre Mazzarello (BMM) promovió la Misión Juvenil Salesiana, que tuvo lugar en el municipio de Linhares (ES) del 17 al 21 de julio, con la participación de 30 adolescentes y jóvenes, y en el municipio de Aparecida de Goiânia (GO) del 25 al 28 de julio, con la participación de 28 adolescentes y jóvenes, para un total de 78 participantes, junto con Hijas de María Auxiliadora, laicos, Salesianos de Don Bosco.
En las Misiones han participado jóvenes mayores de 15 años, provenientes de realidades educativas y socioeducativas de la Inspectoría. Los jóvenes voluntarios jugaron con los niños y visitaron hogares de la región, escucharon a las familias y, para aquellos que lo desearon, rezaron juntos una oración o recitaron un salmo de la Biblia. También participaron en momentos formativos con temas relacionados con la espiritualidad salesiana, la Iglesia y la realidad local.
También en julio, la experiencia misionera (Misión Indígena) tuvo lugar en las aldeas de Meruri y São Marcos, ubicadas en el estado de Mato Grosso, con la presencia de 11 participantes, entre hermanas y laicos. En la Misión Indígena, los voluntarios jugaron con los niños y visitaron las aldeas indígenas, conociendo las realidades de los pueblos.
Es una experiencia de salir de uno mismo, de poner el tiempo al servicio para ser misioneros en el “campo” que el Señor confía.
Así se dirige el Papa Francisco a los jóvenes en Christus vivit: “Queridos jóvenes, por favor, no miréis la vida ‘desde el balcón’, coloquémonos dentro de ella. Jesús no se quedó en el balcón, entró; no mires la vida “desde el balcón”, entra en ella como lo hizo Jesús. Pero, sobre todo, de un modo u otro, luchar por el bien común, ser servidores de los pobres, ser protagonistas de la revolución de la caridad y del servicio, capaces de resistir a las patologías del individualismo consumista y superficial” (CV, 174).
La misión educativa de las Hijas de María Auxiliadora, junto con los laicos, se lleva a cabo a través de una Pastoral Juvenil inculturada que se inspira en el Sistema Preventivo, vivido como una espiritualidad enraizada en la caridad de Cristo y en la solicitud maternal de María. El objetivo principal de este programa pastoral es llevar a las personas al encuentro con Jesús de Nazaret.
En una sociedad fuertemente centrada en el tener, la experiencia de la gratuidad y el servicio desinteresado es una propuesta rica en virtudes educativas. La adolescencia y la juventud son fases vitales favorables para desarrollar las inmensas posibilidades de bien y las posibilidades creativas propias de estas fases de la existencia, al servicio de opciones valientes que respondan a las preguntas sobre el sentido de la vida.
Que Don Bosco y Madre Mazzarello continúen intercediendo por estas experiencias misioneras salesianas, para que todos los que participen, especialmente los jóvenes, puedan “marcar la diferencia” para un mundo mejor.
A experiência junto à Missão Indígena foi, mais uma vez, uma experiência salesiana muito marcante em minha vida!
Bendito seja Deus! Acredito muito na experiência da Missão Juvenil!