Subiaco (Italia). Situada en Subiaco (Roma), sobre el Monasterio y el Santuario de la Santa Gruta de San Benedicto, la Casa de oración y de acogida de San Biagio, de las Hijas de María Auxiliadora de la Inspectoría Romana San Juan Bosco (IRO), es un ambiente educativo y salesiano que favorece las condiciones para un encuentro con Dios.
La centralidad de la Palabra, en particular la experiencia de la Lectio Divina, es la identidad de la Casa de oración. El silencio, el contacto con la naturaliza, la sencillez de vida y los momentos eucarísticos hacen que el clima que se respira esté impregnado de la gratitud alegre y de la acogida del otro.
Las FMA de la Comunidad viven el carisma salesiano acompañando el camino humano y de fe de las personas que cada año, de todas partes de Italia y de Europa, llegan a San Biagio: jóvenes, laicos, consagrados que tienen en común la búsqueda de Dios.
Todos llegan con su mochila llena de espera y parten con una nueva esperanza. Algunos huéspedes dicen:
“Los encuentros en San Biagio han sido para mí alegría, serenidad, fraternidad, acogida y disponibilidad de las FMA. Disfrutar de un momento diario de silencio, de adoración, de reflexión sobre la Palabra es siempre un compromiso y no siempre es realizable. En San Biagio es fácil entrar en nosotros mismos con Jesús y escucharlo en el silencio.”
“La experiencia en San Biagio ha sido enriquecedora por mi actividad de pintor e iconografista. Creo haber recibido los bellísimos dones espirituales de amor, de amistad, de fraternidad y de paz”.
Además de la acogida y la hospitalidad de individuos o de grupos, la posibilidad de hacer los ejercicios espirituales, individualmente o en grupo y el acompañamiento espiritual, se proponen diversas actividades: encuentros de Lectio divina por categorías de personas, cursos de iconografía, trabajo manual y contacto con la naturaleza, “Caminos de luz” para jóvenes, que une cine y espiritualidad.
En San Biagio en seguida se siente uno en casa y de casa. El espíritu de familia es la atmósfera que se respira, gracias a la oportunidad de hacer la experiencia de la fraternidad, compartiendo con las FMA y los otros huéspedes la gestión de las jornadas con los propios ritmos, como en una familia.
Suor Maria Pia Giudici, FMA, que empezó la experiencia en torno a la Palabra y vivió en la Casa de oración hasta el último día de su vida, decía: “En San Biagio ayudamos a las personas a encontrar al Señor”. Lo esencial en Subiaco, es estar abiertas al Misterio.
Es un lugar bellísimo, fascinante, que gran legado recibido, que gran regalo haberlo conocido… espíritu de familia, oración-contemplación, en el corazón conservo el deseo de volver.