Roma (Italia). Se ha publicado el primer número de la revista Da Mihi Animas (DMA) del año 2024, que tiene como tema subyacente la Paz, expresado así en las publicaciones del año: 1. Escuchar la paz; 2. Diálogo, condición para la paz; 3. Ser testigo de la paz; 4. La educación, camino hacia la paz.

Sor María Ausilia De Siena, Consejera para la Comunicación del Instituto FMA, en el editorial del 1º número – Escuchar la Paz expresa las reflexiones que introducen este tema, tan sentido y urgente en el contexto global actual:

“¿Existe la paz? ¿Qué es eso? ¿Cómo puedes alcanzarla? Una cosa es cierta: la historia de ­la humanidad está marcada a lo largo de su curso por situaciones de conflicto… Por eso la paz es un deseo siempre presente que parece inalcanzable. Necesitamos un horizonte común que unifique nuestras ideas de paz dispares y a menudo contradictorias. Más allá de la religión de pertenencia, la ideología política y otros factores divisivos, es importante hacer converger nuestras energías de mente y corazón, personales y colectivas, en un paciente y constante aprendizaje de vivir juntos porque la paz no es simplemente ausencia de conflictos, sino compromiso con el bien común, por una justicia que comienza por la consideración de los más pobres.

La paz es un proceso dinámico que no permite paradas, es un objetivo que avanza cada vez más y que necesita una atención continua. Explorar el significado de la paz y las cuestiones relacionadas que plantean desafíos a nuestra misión educativa es el objetivo de esta revista para el año en curso. Educamos ­para la paz sólo si la encontramos primero en nosotros mismos, si redescubrimos el valor del silencio, de la escucha de la Palabra de Dios, porque la paz es el sueño de Dios para la humanidad”.

Por este motivo – explica sor Ausilia presentando una novedad este año – “en cada número de la revista se incluirá un breve comentario sobre la Palabra de Dios, al final del Dossier que, escrito por plumas autorizadas­, introduce los diversos temas.

Educar para la paz significa aprovechar los innumerables y siempre actuales recursos del Sistema Preventivo, redescubrir el valor de ser “presencia” según el estilo de la asistencia salesiana que nos permite “cuidar” de ­las nuevas generaciones y construir más humanidad y relaciones cargadas de esperanza.

La verdadera paz promueve la cultura del encuentro que presupone el reconocimiento del otro, la educación sobre las emociones, la comunicación no hostil, la gestión sana de los conflictos, la inclusión. La conciencia y la interiorización de los verdaderos valores de la vida son fundamentales para ser proactivos, para poder tomar posiciones claras y con sentido crítico.­

La paz no coincide con una vida tranquila, sino que requiere a menudo determinación, energía, fuerza para ser alternativos en un mundo que sigue los intereses individuales en detrimento del bien común. Aprendamos a escuchar la voz autorizada de tantos testigos de paz que han marcado la historia con su vida y descubramos también a los testigos silenciosos que, en lo cotidiano de su vida, son levadura oculta, capaz de fermentar una cultura de paz en la entrega diaria de sí mismos”.

Otra innovación consiste, teniendo en cuenta los tres años de preparación al 150° aniversario de la primera expedición misionera del 14 de noviembre de 1877, en dar voz, a través de las columnas Entrevista y/o Experiencia, a “las numerosas personas que han dejado su tierra y son felices de evangelizar otros contextos, para afrontar las dificultades con soltura y compromiso”.

En la nueva sección “El camino de la Iglesia” se profundizará también en la sinodalidad y la ecología integral, según las orientaciones del CG XXIV. ¡Disfruta la lectura!

Los números de este año, al igual que los de años anteriores, se pueden consultar online en la página web www.rivistadma.org

¡Feliz lectura!

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