Roma (Italia). El 28 de octubre de 2019, la Facultad Pontificia de Ciencias de la Educación Auxilium dio inicio al año académico 201972020 con la inauguración oficial, en el 50º de la erección canónica. Junto a Madre Yvonne Reungoat, Vice Gran Canciller de la Facultad, estaban presentes la Vicaria general sor Chiara Cazzuola, en visita canónica a la Visitaduría Maria, Madre de la Iglesia (RMC); la Secretaria general, sor Piera Cavaglià; la Consejera para la Administración, sor Vilma Tallone y la Consejera para la Pastoral Juvenil sor Runita Borja.
La mañana se inició con la celebración eucarística presidida por Mons. Jan Romeo Pawlowski, Delegado para la Representación pontificia de la Secretaría de Estado que, citando el discurso de Juan Pablo II a los universitarios del 1983, hizo una llamada al estudio como trabajo del intelecto a la búsqueda de la verdad, que no se encuentra si no se ama. El estudio, que “es trabajo en sentido moral”, requiere responsabilidad y conduce a la caridad. Mons. Pawlowski terminó la homilía con las palabras de Santo Domingo Savio: “Nosotros aquí hacemos consistir la santidad en estar muy alegres y en el perfecto complimiento de nuestros deberes”, para que resonaran entre los educadores llamados a llegar al corazón del mundo con el feliz mensaje.
Con la relación sobre el año académico 2018-2019, la Presidenta, Pfra. Piera Ruffinatto, recorrió las etapas, los procesos, los eventos significativos y las experiencias compartidas en dicho tiempo, todo lo cual ha ido forjando el compromiso de la Facultad a “responder al desafío de un mundo siempre más complejo y globalizado”.
La Prolusión Académica de título: “Metamorfosis de la democracia e implicaciones educativas”, tuvo como protagonista al Prof. Enrico Letta, Presidente de la Paris School of International Affairs de la Universidad Ciencias Po de París, que puso a la luz la conexión entre democracia y formación, en este tiempo de gran revolución, comparándolo según él a la revolución del 1400, con la invención de la imprenta de caracteres móviles obra de Gutenberg, “una revolución debida a la innovación tecnológica, ligada al Smartphone, que es ya nuestra segunda identidad”.
Después de haber ilustrado con algunos ejemplos los grandes cambios de que somos testigos, Enrico Letta llamó la atención sobre la importancia de la formación, que puede marcar la diferencia y ayudar a los jóvenes a responder a las demandas de sentido y encontrar, “a través de múltiples experiencias, los puntos cardinales de la brújula que orienta nuestra vida, que no se encuentra en internet, ni en Google”. Por esto invitó “a no tener miedo de desafiar a la modernidad”, e ir a la substancia de los valores que “en un torbellino de transformaciones se vuelven de extraordinaria actualidad; a trabajar sobre valores fundamentales, para dar un sentido a las cosas que se hacen”. En fin, refiriéndose a la famosa historia de los albañiles medievales, concluyó con este augurio: “La diferencia está aquí: uno se para en aquel gesto y lo encuentra pobre de significado, el otro inserta ese gesto pobre en un diseño general que da sentido no sólo a aquel gesto, sino a su jornada, a su profesionalidad y a su vida. Ánimo, pues: vosotros estáis aquí para construir catedrales”
La última palabra fue para la Vice Gran Canciller, Sor Yvonne Reungoat, que antes de pronunciar la fórmula de inauguración del año académico dirigió su saludo a los presentes en la sala, en particular a los docentes y a los/as estudiantes, exhortándolos a escuchar profundamente la realidad para “intuir juntos el futuro con pasión, entusiasmo y creatividad, disponibles a afrontar los cambios para construir cultura y no simplemente repetir; para entrar con apertura, deseo de compartir, de dejarse guiar para ser siempre más conscientes de la responsabilidad en la sociedad y en la Iglesia”.
Al final, la Madre declaró abierto el nuevo año académico.
