Roma (Italia). La Madre General, Sor Yvonne Reungoat, se dirige a las Hijas de María Auxiliadora en la proximidad de la Fiesta de la Gratitud Mundial, “un evento carismático que refuerza la comunión del Instituto FMA en el espíritu de familia”, que se celebrará el 25 de abril de 2021 en la Pontificia Facultad de Ciencias de la Educación “Auxilium”, en Roma.
El contexto en que se celebra, de cambio de época, es ocasión para ayudar a releer los acontecimientos, intensificando la misión educativa, “vía privilegiada que forma para una cultura de la vida” y momento oportuno para afrontar con confianza y con coraje los desafíos en que las FMA están inmersas.
La gratitud es uno de los aspectos de la identidad del Instituto de las FMA y redescubrirla, construyendo red entre las Comunidades, para celebrar la Fiesta del Gracias Mundial, es signo de vitalidad y de esperanza, que encuentra fundamento en el misterio pascual y alimenta una sinergia de intentos educativos para bien de las nuevas generaciones.
“Construir red es un signo tangible del creer en el “nosotros”, en el valor de la comunidad educativa presente en el tejido social y eclesial; (…) es poner atención en la educación integral propia del humanismo pedagógico salesiano de Don Bosco y de Madre Mazzarello, definiendo líneas de acción comunes, estudiando modalidades para crear nuevas sinergias educativas y poder dar respuestas, incluso si se están verificando constantemente, a las expectativas de las jóvenes y de los jóvenes hoy.”
La Madre invita a las FMA a reconsiderar la Exhortación Apostólica Christus vivit, en la que podemos encontrar líneas claras e indicativas para promover la cultura de la vida en los jóvenes. Destaca la urgencia de una formación específica como educadoras-formadoras, recordando que “todas las fases de la vida requieren atención formativa para vivir de modo significativo y gozoso la propia vocación”. Formarse es una exigencia irrenunciable para “comprender la `revolución cultural´, la importancia de nuestra presencia carismática en las redes sociales, la necesidad de comunicar la fe con un lenguaje comprensible y con la pasión educativa del da mihi animas cetera tolle.”
Recordando la misión educativa de la Pontificia Facultad de Ciencias de la Educación “Auxilium” y de las otras Instituciones de Estudios Superiores del Instituto FMA en el mundo – comprometidas en ser “talleres de cultura y de vida”, traduciendo en oportunidades educativas los retos del tiempo contemporáneo – la Madre subraya la necesidad de una formación sistemática con laicos y laicas, para construir redes de corresponsabilidad y dar continuidad al carisma educativo salesiano.
“La misión educativa nos pide construir una eficaz red educativa con la Familia Salesiana en la Iglesia y en la sociedad para ser “agentes” de la cultura de la vida, promotoras de una humanidad renovada en el espíritu del Evangelio y en fidelidad al carisma”.
Promover la cultura de la vida, en el tiempo de la pandemia de Covid-19 y de las consecuencias que tocan a la comunidad entera, significa despertar la esperanza que se manifiesta en la belleza del Cristo Resucitado que se anuncia, en la fraternidad que se respira, en la plegaria y en el espíritu de comunión. Recordando la carta Testimoni della bellezza di Dio – enviada “a los hermanos y hermanas consagrados” por el Prefecto y por el Secretario de la Congregación para los Institutos de Vida consagrada y las Sociedades de Vida apostólica el 25 de marzo de 2021, a los 25 años de la Exhortación apostólica Vita Consecrata de San Juan Pablo II – la Madre comparte la llamada a ser “mujeres portadoras de belleza” y a verterla en las Comunidades Educativas y en la vida cotidiana como muestra de gratitud y solidaridad.
La Madre, en comunión con el Instituto FMA, expresa el GRACIAS a las hermanas de toda edad, formación, cultura, que se emplean cada día con pasión en la misión educativa; a las hermanas ancianas o enfermas, que custodian y mantienen vivo el carisma con la oración y el ofrecimiento diario; a laicas y laicos, que en varios roles y competencias sienten la exigencia de un nuevo pacto educativo para realizar con la familia, con la escuela, en la convicción de que pensar en la educación es pensar en las generaciones futuras y en el futuro de la humanidad. Se dirige con gratitud a los miembros de la Familia Salesiana, el Rector Mayor, a las Exalumnas/os, a las jóvenes y a los jóvenes, que son interlocutores privilegiados de la misión educativa: “Gracias, queridas/os jóvenes por creer que “Cristo vive. Él es nuestra esperanza y la más bella juventud de este mundo” (Christus vivit, 1)”.
La Madre renueva la invitación a celebrar la Fiesta de la Gratitud, el 25 de abril de 2021, “en un gran abrazo mundial” y en red para promover la cultura de la vida.
Grazie Madre Yvonne per quello che sei stata per noi. Madre, sorella, amica e maestra esperta nella vita… Grazie perchè ti sento concreta nelle tue circolari e nei tuoi interventi. Grazie per la tua parola che tocca ed entra nei cuori di chi ti ascolta o ti legge. Grazie Madre perchè ti sentiamo molto vicina a noi, sei meravigliisa, se unica, irrepetibile… Grazie madre di cuore. Grazie perchè ci sei
Le 25 avril, Fête de la reconnaissance ,en union avec tout l’Institut, je te souhaite, Chère Sœur
Yvonne, une très belle Fête.
Merci pour le don de ta vie.
En communauté à St Cyr M. Dominique, nous allons partager la circulaire : Pour une culture de la vie que je viens de découvrir. Avec grande affection, Sr Michelle