Turín (Italia). El 21 de enero de 2024 finalizaron las Jornadas de Espiritualidad de la Familia Salesiana en Valdocco, Turín, reuniendo a unos 350 participantes de Grupos SF de todo el mundo para reflexionar sobre el Aguinaldo 2024 del Rector Mayor, el Cardenal Ángel Fernández Artime.
El 20 de enero, el penúltimo día para los participantes fue “itinerante”. Por la mañana, después de la celebración eucarística en la Basílica, pudieron conocer y profundizar algunas de las experiencias de jóvenes de todo el mundo.
En la homilía de la Santa Misa de inicio de la jornada, recordando el Evangelio de Marcos y el sueño de Don Bosco, don Joan Lluís Playà, Delegado Central del Secretariado para la Familia Salesiana, subrayó la invitación a “renovar vitalmente nuestra conciencia de discípulos, a trasparentar los rasgos de la vida de Jesús en la que nosotros, Familia Salesiana, somos más sensibles, según la Carta de Identidad, las Constituciones o los Estatutos de los respectivos Grupos – estamos llamados a ser portadores del amor de Jesucristo a los jóvenes. Estas narraciones son también una clara indicación para considerar y, si es necesario, para redescubrir y hacer nuestra la experiencia de Cristo en Don Bosco y ponerla de relieve en nuestra misión pastoral” (Video).
¿Cómo hoy los jóvenes, principales destinatarios de la misión apostólica de la Familia Salesiana, hacen realidad el sueño de Don Bosco en sus ambientes? Esta es la pregunta que guió el posterior encuentro con las experiencias de los jóvenes con el objetivo de verificar la actualidad del sueño de Don Bosco y, al mismo tiempo, reavivar el sueño de Dios en cada uno y en los respectivos Grupos de la Familia Salesiana:
Voluntariado de la Juventud Misionera Salesiana en Ecuador: es una experiencia iniciada en 1982 que involucra a más de 2.500 jóvenes coordinados por los Salesianos de Don Bosco junto con las Hijas de María Auxiliadora y las Hijas de los Sagrados Corazones de Jesús y María, regulada y animada por un proyecto oficial de la Familia Salesiana. El papel de los voluntarios es ayudar a los diferentes grupos prioritarios, aportando sus capacidades físicas e intelectuales. Su labor contribuye, por ejemplo, a la educación de comunidades andinas y amazónicas, a la difusión de la Palabra de Dios como catequistas o al acompañamiento en el cuidado y formación de niños y jóvenes en situación de riesgo y vulnerabilidad (Video).
El Proyecto Buzzetti, en España, es un programa de la Fundación Proyecto Don Bosco en respuesta a niños y niñas sin hogar y jóvenes sin recursos, de entre 18 y 29 años, que se encuentran en situación de desventaja y riesgo social. Muchos de ellos, al haber alcanzado la mayoría de edad, después de haber finalizado su custodia en los Centros de Protección o Justicia Juvenil, se encuentran sin hogar. Fundada en 2009 en la ciudad de Jaén, actualmente cuenta con 22 pisos tutelados (en Andalucía y Canarias, 3 de ellos bajo protección internacional) y un programa de acompañamiento a jóvenes en situación de calle, que en 2020 ayudó a más de 90 de ellos. En noviembre de 2015, la Fundación recibió el Premio de Derechos Humanos de la Asociación Andaluza de Derechos Humanos.
De Camboya es la experiencia de Chea Samnang, un joven que no tenía esperanza en su futuro, hasta que se cruzó con Don Bosco con la Fundación y la Escuela de Especialización que forma a los jóvenes camboyanos para que tengan un lugar reconocido en el mundo del trabajo. Casi 4.000 asisten a los cursos previos de formación básica, que en primer lugar garantizan una comida diaria completa. Chean consiguió un trabajo en un importante fabricante de automóviles.
En una conexión online desde El Salvador, sor Ana Beatriz Solito Sánchez, FMA, presentó ESSALES una obra digital que, partiendo de María Domenica Mazzarello y Don Bosco y de la lectura de la realidad por parte de un creyente, ofrece formación diaria sobre la Espiritualidad Salesiana digital a los educadores para que, fortaleciendo su espíritu, sean una presencia educativa entre los niños y jóvenes. “Salesianidad en un clic” es su lema.
Con prestidigitación y “efectos mágicos”, Maga Gascar – nombre artístico de Rita Sofia Utzeri – proviene de Trapani, Sicilia, y es miembro consagrado del Movimiento de los Testigos del Resucitado, estudiante del Mago Sales. Es un “Mago sin Fronteras”: desde 2006 ofrece sus espectáculos para apoyar las misiones salesianas en Madagascar, llevando el mensaje de igualdad y derechos humanos. Con sus espectáculos, hechos de alegría y solidaridad concreta, comunica que “solo el don es mágico”.
Por la tarde, los participantes, divididos en grupos lingüísticos, recorrieron los lugares salesianos encontrando testigos: algunos jóvenes del oratorio de Valdocco y del Movimiento Juvenil Salesiano contaron cómo el encuentro con Don Bosco transformó sus vidas; en la Casa FMA de Piazza Maria Ausiliatrice, 35, donde nacieron algunas ramas de la Familia Salesiana, algunos representantes expresaron el sueño del respectivo Grupo FS al que pertenecen; en Valsalice , donde descansaron los restos de Don Bosco de 1888 a 1929 y donde se formaron muchos salesianos que dieron frutos de santidad, martirio y entrega incondicional, don Alessandro Borsello, director de la Comunidad SDB, y don Pierluigi Cameroni, postulador general, presentaron los lugares significativos y la santidad salesiana en sus dimensiones.
Caracterizada por la alegría salesiana en el espíritu de familia, fue la velada “en torno al Rector Mayor”, animada por los novicios salesianos del Colle Don Bosco con cantos, bailes y actuaciones de los diferentes Grupos, para expresar la gratitud y el afecto a Don Ángel Fernández Artime, llamado a la misión de Cardenal, y la alegría de estar juntos como Familia Salesiana.
El domingo 21 de enero, en la solemne celebración eucarística de clausura en la Basílica – que concluyó con la foto en el altar de Don Bosco de los representantes de los Grupos SF con el Rector Mayor – Don Ángel presentó la Carta de Don Bosco 2024 con el mandato a los “queridísimos hijos e hijas de la FS”:
“Este es todo el legado que les dejo: un sueño. Ese sueño que ha guiado mi vida. Ahora es tu sueño. Lo que he tenido más preciado, te lo doy. Vino de lo alto y, como todo lo que nace de Dios, no puede morir. Ha sido mi vocación y mi misión”.
Este es el íncipit de la carta-síntesis, traducida a los diversos idiomas y leída íntegramente por el Sr. Claudio, de la Comunidad del Santuario, al final de las Jornadas, después del trabajo de los Grupos de pertenencia, para responder a la pregunta: ¿cuál es el sueño de Dios para la Familia Salesiana hoy?
Don Joan Lluís Playà explicó los pasos de la redacción del texto de la carta, el sábado, en la que los grupos lingüísticos trabajaron intensamente en la síntesis de las Jornadas, resumidas en doce páginas revisadas por el Secretariado para extraer los puntos esenciales, con el toque final del Don Bruno Ferrero, pedagogo y escritor, para llegar mejor a los corazones. (texto de la Carta)
Después de agradecer a los jóvenes ponentes, Giuli Lattanzi y Silvio Monteiro, y al Secretariado de la Familia Salesiana por la organización y el trabajo durante las Jornadas, el Rector Mayor saludó a los participantes con una reflexión final: “Volviendo a nuestras Inspectorías, tenemos todo un año para celebrar los 200 años de esta visión-sueño, ¡y debemos hacerlo! Hoy, 200 años después, Don Bosco no tiene otras manos, ni otros ojos, ni otro corazón capaz de amar a los jóvenes que el nuestro. Estoy convencido de que hoy nos dice: ‘Haced lo que yo ya no puedo hacer hoy, porque hoy hay tantos que os necesitan como en mi tiempo’. Es como si el sueño fuera de nuevo actual para nosotros. Y más que contar una historia, debemos, sobre todo decir cómo hoy podemos dar una respuesta auténtica, fresca y oportuna, porque Dios sigue bendiciendo el carisma de Don Bosco. La prueba de ello somos todos nosotros y miles y miles de jóvenes” (Video).
Foto: Flickr FMA
