Padua (Italia). El 6 de mayo de 2023, día en que se recuerda a San Domenico Savio, en el Instituto Don Bosco de las Hijas de María Auxiliadora en Padua, Inspectoría S. Maria D. Mazzarello (ITV), se inauguró el Aula de Robótica, creada gracias al financiamiento de la Fundación Cariparo, como parte del Proyecto Escuela de Innovación.
Dado que la acción educativa sólo puede ser eficaz siguiendo los tiempos – si no anticipándose a ellos – con gran atención a los contextos sociales y culturales, Don Bosco quería lo mejor para sus muchachos: talleres y herramientas de vanguardia, para que pudieran competir en el mundo del trabajo. Heredando y cultivando este espíritu, el Instituto Don Bosco de Padua ha decidido experimentar también en el campo de la Robótica.
El acto contó con la presencia de la Concejala de Servicios Informáticos y Telemáticos del Municipio de Padua, Margherita Cera, quien aprovechó para saludar a los alumnos y sus familias al finalizar el curso escolar. A continuación tomó la palabra el Dr. Francesco Bicciato en nombre del organismo donante, quien entendió la capacidad de las FMA para integrar la actividad docente tradicional con actividades experienciales, proyectos multidisciplinarios e innovación tecnológica.
Luego intervino Micheal Broccardo, de Mind4Children, una spin-off de la Universidad de los estudios de Padua “al Servicio del Potencial Humano”, involucrada para el apoyo a la formación de profesores y educadores.
Sor Daniela Faggin, FMA, Directora de la escuela, subrayó que la creación de un aula de Robótica es otro elemento importante de la estrategia salesiana, que pretende armonizar el Carisma, basado en la educación integral de la persona, con la exploración consciente del potencial de las nuevas tecnologías.
De hecho, el aula ha sido diseñada para fomentar un tipo de aprendizaje más atractivo y estimulante: el que pasa por la experiencia práctica, que requiere trabajar en proyectos para implementar y probar. Este nuevo espacio facilita el intercambio de información y conocimiento entre los jóvenes, quienes están llamados a abordar juntos problemas de diversa índole, a pensar y compartir para llegar a soluciones, construyendo conocimiento juntos. Habilidades, estas, que “huelen a futuro”.
