Praga (República Checa). Del 20 al 26 de noviembre de 2024, Madre Chiara Cazzuola visitó la Inspectoría María Inmaculada (CEL) de la República Checa y Lituania. Recibida en la tarde del 20 de noviembre en el aeropuerto de Praga por la Inspectora, Sor Zdeňka Švédová, llegó a continuación a la Casa Provincial de San José en Praga – Kobylisy.
El 21 de noviembre, acompañada por la Inspectora, visitó la Comunidad del Espíritu Santo en Pilsen, que la acogió con pan y sal según la costumbre tradicional eslava, como signo de hospitalidad y cordialidad.
Con la Inspectora y la responsable del Centro Pastoral de Skvrňany, Sor Hana Koudelková, la Madre visitó la cercana iglesia de los Adventistas del Séptimo Día donde, desde hace aproximadamente un año y medio, se celebran misas dominicales. De hecho, el obispado de Pilsen ha establecido que el Centro Pastoral de Skvrňany, a partir del 1 de septiembre de 2017, será confiado al cuidado de las Hijas de María Auxiliadora y de los Salesianos de Don Bosco de la Inspectoría San Juan Bosco (CEP). La parroquia se caracteriza por una orientación misionera: su misión es la primera evangelización y la nueva evangelización, especialmente en el distrito de Pilsen – Skvrňany. El servicio sacerdotal es realizado por los salesianos coadjutores de la comunidad de Pilsen-Lobzy. Allí se reunió con los pastores de la iglesia local.
Posteriormente, la encargada, Sor Dagmar Vedrová, mostró a la Madre el Centro Juvenil que se encuentra en el edificio donde vive la comunidad. También pudo saludar a uno de los estudiantes que viven allí, un profesor de matemáticas que ayuda en el Centro, y al padre Igor Bibko, párroco de las parroquias vecinas, que celebra la Santa Misa en el rito greco-oriental y vive en la misma casa.
Por la tarde, Madre Chiara visitó el Centro Juvenil Salesiano dirigido por los hermanos salesianos en Praga-Kobylisy, donde también trabajan las FMA, y apreció la posibilidad de que las hermanas puedan colaborar con ellos. En el Centro saludó al Inspector, P. Martin Hobza, al Secretario Inspectorial, al Coadjutor Pavel Liškutin, al Director de la Comunidad y al responsable del Centro Juvenil. Al encontrarse con dos grupos de estudiantes de catecismo impartidos por las FMA, les dijo que es importante conocer a Jesús, pero es aún más importante tener a Dios en el corazón.
El 22 de noviembre, la Madre comenzó la jornada dando los buenos días a las jóvenes de la Escuela Vocacional Casa Praga-Karlín, animándolas a vivir bien estos años de estudios y deseándoles una vida feliz y plena. También visitó las salas de la Escuela Vocacional, la Escuela Infantil y el Colegio y saludó al personal de esta obra.
Por la tarde, se reunió con el Consejo Inspectorial, pasando un tiempo precioso y formativo con la Inspectora y las consejeras, respondiendo también a sus preguntas. Más tarde asistió a la Misa celebrada en casa por el Inspector SDB, P. Martin Hobza. Estuvieron presentes varios miembros de la Familia Salesiana: VDB, Salesianos Cooperadores, Fraternidad Contemplativa de María de Nazaret. Al final, la Madre saludó a todos los presentes. Subrayó que es bueno encontrarse y poder compartir el Carisma que une a la Familia Salesiana. La fiesta continuó en la Escuela con refrigerios.
El 23 de noviembre, en la Casa de Praga – Karlín, se celebró el encuentro de todas las FMA de la República Checa con la Madre que, después de la presentación de las cinco Comunidades, respondió a las preguntas y animó con sus palabras: «Hay una gran variedad de obras carismáticas. Decís que sois pequeñas, pero hay un gran potencial de recursos. Veo un gran potencial de bien y doy gracias al Señor por lo que hacéis». Y continuó: «Me parece que en la Inspectoría soís muy amables y simpaticas con la gente. Os acogen con tanta cordialidad, os quieren. Esto es característico de nuestra espiritualidad. Ser acogedores y cordiales es importante en la Iglesia».
Por la tarde, Madre Chiara visitó los lugares más importantes de la ciudad con algunas hermanas: la Catedral de San Vito, Wenceslao y Adalberto y el Puente de Carlos sobre el río Moldava.
A continuación, pasó una noche de fraternidad con las hermanas con un cuestionario sobre la historia de las primeras hermanas en la República Checa durante la clandestinidad y hasta nuestros días. El juego nos hizo revivir el tiempo pasado y sembró en los corazones un sentimiento de gratitud por las maravillas que el Señor ha obrado.
La segunda parte de la visita tuvo lugar en Lituania, a la que llegó en avión junto con la Inspectora.
En la mañana del 25 de noviembre, en la Casa de Kaunas, la Madre se encontró con el párroco y con dos Salesianos Cooperadores. Pasó el almuerzo en compañía de cuatro hermanos salesianos de las dos Comunidades de Vilnius y Telšiai, de la Circunscripción Especial de Piamonte y Valle de Aosta (ICP).
Luego visitó el Centro de Día Infantil que se encuentra en la misma casa. Los niños cantaron para ella, rezaron juntos y le regalaron a la Madre un dibujo. Posteriormente, se reunió con las dos comunidades reunidas.
El 26 de noviembre se trasladó a Kaišiadorys, donde participó en la Santa Misa en la Catedral, presidida por el obispo emérito Mons. Juozas Matulaitis. Madre Chiara agradeció al Obispo por acoger a las FMA en su diócesis y en la parroquia de Kaišiadorys. A su vez, el Obispo expresó su gratitud por la Comunidad FMA como presencia significativa para la gente.
La Madre General también visitó la capilla del Beato Mártir Mons. Teofilius Matulionis, cuya conmovedora historia le contaron las hermanas.
Hacia el final de la visita, saludó a un grupo de niños que se preparaban para su Primera Comunión, les preguntó sus nombres, qué hacían y elogió su bondad. Fue un encuentro corto pero alegre.
Las FMA están agradecidas al Señor por la visita de la Madre a su Inspectoría, por su presencia sencilla y significativa y por sus palabras sabias e incisivas.
Foto: Flickr FMA