Cabinda (Angola). El 31 de agosto de 2022, día de la conmemoración de Don Bosco, tuvo lugar la colocación de la primera piedra de una nueva obra de las FMA de la Visitaduría Reina de la Paz (ANG).
Las FMA están presentes en Cabinda desde el 2010 a petición del entonces Obispo Mons. Filomeno Vieira Dias. La Diócesis ofreció a la comunidad una casa, pero sobre todo mucho trabajo pastoral en diversas áreas: Coordinación de la Catequesis, Pastoral Juvenil, oratorios en la periferia de la ciudad, enseñanza en la Escuela Secundaria de la Diócesis.
Después de algunos años de presencia profética en aquella zona de Angola, la Comunidad ha buscado un lugar donde “establecer su tienda” y lo ha encontrado en la periferia de Cabinda, donde falta aún todo, pero hay abundancia de personas y sobre todo de niños. El terreno, donado por el Obispo Belmiro Cuica Chissengueti en el 2020, se encuentra en el distrito de Simindele, en la parroquia de Santa Mónica.
El 31 de agosto, la ceremonia de colocación de la primera piedra tuvo lugar en presencia de la Comunidad María Auxiliadora de las FMA, de la Superiora de la Visitaduría, sor Natalia Miguel, de la Ecónoma sor Zvonka Mikec y de sor Sharon Algar, Consejera.
Fue una ceremonia sencilla, presidida por don Carlos Mbambi, con la presencia de la Comunidad SDB San Pedro de la Visitaduría Mamá Muxima (ANG). Estaban presentes también el ingeniero propietario de la empresa de construcciones que trabajará en la obra, las autoridades tradicionales del barrio, las autoridades locales y la Administración, los niños, que esperan con inquietud saber qué pasará en esta tierra, y algunos vecinos.
El ingeniero subrayó la satisfacción de trabajar con el Instituto de las FMA, una Congregación que se ocupa de la educación. Presentó el proyecto completo que comprende: en primer lugar, la construcción de una Escuela materna con refectorio, cocina y área administrativa y una Capilla, que puede estar abierta a la población. Seguirán, en la otra mitad del terreno, la Casa de las FMA y otras estructuras educativas.
Después de la bendición del terreno, llegó la colocación simbólica de la primera piedra – a los pies de un árbol dejado a propósito como signo de compromiso con la Laudato Si’ – por parte de don José Agripino Filho, Vicario episcopal y párroco de Santa Mõnica.
Sor Natalia Miguel, la Superiora, tomó la palabra para agradecer a la Providencia el haber colaborado en la realización del sueño de las FMA y de muchas personas, sobre todo de los niños que esperan este espacio educativo. “Creemos en la educación y, después de estos años de permanencia tan significativa en esta realidad, podremos finalmente tener un espacio – una PRESENCIA nuestra – donde ir a realizar nuestro sueño de formar buenos cristianos y honrados ciudadanos”. dijo.
Es significativa también la construcción de la Capilla, donde nutrirse con la Palabra y el Pan de la Vida y juntos alabar al Señor, con el reconocimiento a la bienhechora coreana que financia este lugar sagrado.
En el 150º Aniversario de la Fundación del Instituto de las FMA, confiamos a María esta primera piedra, para que acompañe la obra y todos los proyectos educativos, dando gracias a Dios por el don del Carisma salesiano y por cómo está creciendo poco a poco entre la gente de Cabinda.