Rivere (Italia). El 24 de agosto de 2024 en Rivere, aldea de Cartosio, Alessandria, con motivo del centenario de la consagración de la Iglesia de San Juan Bautista, la plaza frente a ella fue nombrada en honor a Sor Assunta Gaino (1849-1886) y Sor Franca Lajolo (1928-2007), Hijas de María Auxiliadora originarias del lugar.
En una carta a los feligreses, el párroco, don Doménico Pisano, motiva de la siguiente manera esta decisión:
“La presencia de una pequeña iglesia en un pueblo, la celebración de un cumpleaños tan importante como los 100 años, debe hacernos pensar en la historia de la Iglesia que ha visto nacer tantos lugares de culto fuera de las ciudades para que los campesinos pobres se sintieran bendecidos por Dios o por un santo en particular como San Juan Bautista. (…) El fruto de la fe respirado entre las casas ha suscitado a lo largo del tiempo el Sí a la llamada de Dios de las religiosas (Sor Assunta y Sor Franca, FMA) y de un joven, Giovanni Gaino, que se convirtió en sacerdote diocesano y, con su familia, donó a vecinos, parientes y amigos una pequeña iglesia que lleva el nombre de un santo especial: Juan el Bautista. Hoy, como entonces, necesitamos mirar lejos y en profundidad si queremos construir una Iglesia de piedras vivas unidas por la caridad. Las familias, con la ayuda de San Juan Bautista, San Juan Bosco y Santa María Domenica Mazzarello, siguen siendo llamadas hoy a ayudar a los jóvenes a mirar en la dirección correcta. Encomendémonos todos a estos santos para que nos ayuden en esta tarea tan importante“.
Nacida en Cartosio el 28 de abril de 1848, María Antonia Santina – más tarde Sor Assunta Gaino – pronto dejó su valle para ir “al servicio” de las familias adineradas, para ayudar económicamente a sus familias de origen. En esos años supo de una joven de Mornese, María Domenica Mazzarello, y con ella, el 5 de agosto de 1872, a la edad de 24 años, fue una de las primeras neo-profesas del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora. En la Cronohistoria (Vol. II) se habla de ella como “encargada del cuidado de la vaca – la ‘Señora Vaca’, muy preciosa para la comunidad – y del huerto”. En la construcción del Colegio, junto con Sor Ángela Denegri y Sor Ángela Rossi, fue definida como “ejemplar de virtud, energía física y voluntad”. Por su espíritu de trabajo y sacrificio, a pesar de su mala salud, y por su profunda humildad, fue muy estimada por la Madre Mazzarello. Sor Assunta fue una de las primeras FMA que se trasladó a la Casa Madre de Nizza Monferrato y murió allí, el 29 de junio de 1886, con sólo 38 años.
Sor Teresa Francesca Lajolo, conocida por todos como Sor Franchina, nacida en Cartosio en 1928, tenía sólo doce años cuando su madre murió en un accidente de bicicleta. Fue la segunda madre quien le aconsejó estudiar en las FMA de Acqui, donde asistió al inicio Profesional, al oratorio y al taller de verano. Luego continuó en Niza con el Instituto Magistral, donde maduró su vocación gracias a la presencia atenta de las hermanas profesoras y asistentes y, aún más, a la guía sabia y discreta de Madre Ersilia Canta, entonces Directora de la Casa. Hizo su profesión el 5 de agosto de 1951 y dio su serena presencia como educadora a las niñas de la Escuela Primaria de varias casas del Piamonte, especialmente a Saluzzo. Luego, debido a su salud cada vez más precaria, en 1986 fue trasladada a Nizza “San José”, donde es recordada como una mujer de paz, de mucha oración y caridad, atenta a las pequeñas cosas y a las necesidades de los demás, una celosa apóstol de la “buena prensa”, una ferviente animadora del mes de mayo también para los lugareños, por quienes era buscada con afecto. En el corazón y en las oraciones de Sor Franchina siempre estaban su familia y sus amigos de Cartosio. El Señor la llamó a sí el 15 de septiembre de 2007.
El 24 de agosto de 2024, según informó “L’Ancora”, la informativo semanal entre Alto Monferrato y Liguria, toda la comunidad de Rivere, la Parroquia de Cartosio, la administración municipal y muchos voluntarios de la ciudad estuvieron presentes en la Santa Misa, celebrada por el párroco, Don Domenico Pisano, para conmemorar los 100 años de la consagración de la capilla. La celebración se llevó a cabo al aire libre, en el prado, para permitir la participación de todos. Por la noche, después de la proyección de un video realizado por Pieralberto Assandri con las fotos históricas recuperadas por los lugareños y de una breve conferencia organizada por Mauro Massanova, investigador de la historia local, sobre los orígenes de Rivere, el Gaino, y las razones que llevaron a la construcción de la iglesia en 1924, Raffaella Morena contó las razones que llevaron a la dedicación de la plaza a las FMA.
Todo el evento reunió a casi 140 personas, no solo de Cartosio, sino también de los pueblos de los alrededores y de Milán, Cuneo, Génova, que regresaron a Rivere para participar a esta fiesta.
El nombre de esta plaza representa, para el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, un hermoso gesto de afecto y gratitud por parte de la población, testimoniando la huella que cada hermana deja con su vida entregada a Dios y a los jóvenes.