Louvain-la-Neuve (Bélgica). Del 26 al 29 de septiembre de 2024, el Papa Francisco realizó su 46º viaje apostólico a Luxemburgo y Bélgica (programa).

Después de su visita al Gran Ducado de Luxemburgo, llegó a Bélgica el 27 de septiembre y se reunió con profesores universitarios en la “Promotiezaal” de la “Katholieke Universiteit Leuven” y el 28 de octubre, en el Aula Magna de la “Université Catholique de Louvain” se reunió con jóvenes universitarios.

En Lovaina-la-Nueva, las Hijas de María Auxiliadora de la  Comunidad San Juan Bosco  de la  Inspectoría Notre-Dame des Nations (FRB) comparten su vida con los estudiantes universitarios viven con ellas en el “kot”.

“Somos tres FMA con 20 jóvenes que viven en la casa y comparten la cocina, el refectorio y la sala de estar. El acompañamiento se hace en la vida cotidiana. Tuvimos la alegría de recibir al Papa en nuestra ciudad de Lovaina-la-Neuve y en el fin de semana del Acontecimiento de la Esperanza”, dice la Directora, Sor Isabelle Batantou Mpassi.

En el programa de la visita fue significativo el deseo del Santo Padre de llegar a las instituciones académicas y a los jóvenes que, a través de la formación cultural, construyen su futuro.

“Esta es la primera tarea de la Universidad: ofrecer una formación integral para que las personas reciban las herramientas necesarias para interpretar el presente y planificar el futuro – dijo en su discurso en la Universidad de Lovaina –  La educación cultural, de hecho, nunca es un fin en sí misma y las universidades no deben correr el riesgo de convertirse en ‘catedrales en el desierto’; Son, por su naturaleza, lugares que impulsan nuevas ideas y estímulos para la vida y el pensamiento del hombre y para los desafíos de la sociedad, es decir, espacios generativos.

Es bonito pensar que la Universidad genera cultura, genera ideas, pero sobre todo promueve la pasión por la búsqueda de la verdad, al servicio del progreso humano. (…) No se trata de multiplicar nociones y teorías, sino de hacer de la formación académica y cultural un espacio vital, que incluya la vida y hable a la vida”.

Marie Eliane, una de las estudiantes que vive con las FMA, expresa la emoción de estos momentos: “He seguido los diversos encuentros que ha tenido en el país: la visita a las universidades de Lovaina y Lovaina-la-Neuve con motivo de su 600 aniversario, la visita sorpresa a las Hermanitas de los Pobres y el desayuno con los pobres en Saint Gilles… ¡Tuve la inmensa alegría de verlo junto con varios miles de jóvenes en el festival Hope Happening el sábado! Durante su viaje, el Santo Padre tuvo la valentía de abordar algunos temas muy delicados: los abusos, el aborto… Básicamente, lo veo como un llamado a buscar la verdad (Cristo) y a atreverse a proclamarla en todas sus dimensiones, no solo las que están en sintonía con el mundo, sino con un gran amor por el hombre y la mujer, porque Dios quiere salvar a todos. El Santo Padre estaba físicamente agotado, pero trajo una gran alegría y esperanza para todo nuestro país. ¡Que su camino dé frutos de fe, de esperanza y de caridad en nuestra sociedad!“.

A continuación, abordó varios temas con los estudiantes de la Universidad de Lovaina -entre ellos las mujeres y la cultura del descarte- para concluir con el tema de la verdad: “Sin la verdad, nuestras vidas pierden sentido. El estudio tiene sentido cuando busca la verdad, cuando trata de encontrarla, pero con una mente crítica. Pero la verdad, para encontrarla, necesita esta actitud de crítica, para que podamos avanzar. El estudio tiene sentido cuando busca la verdad, no lo olvides”.

Emmanuel fue uno de los jóvenes que escuchó y apreció las palabras del Papa: “La visita del Papa a Lovaina la Nueva me ha dado una gran alegría. Con un grupo de estudiantes del kot y de la parroquia, vinimos a darle la bienvenida a su paso por Lovaina-la-Nueva, fuera del Aula Magna, y seguimos su discurso en una pantalla gigante. Me sentí muy orgulloso de ser un joven católico. La misa dominical también fue muy hermosa, con el Papa reuniendo a muchas personas en una solemne Eucaristía. Creo que fue un momento fuerte para la Iglesia belga, vivido en unidad“.

El sábado 28 por la tarde, en uno de sus eventos “no programados”, el Papa Francisco se unió sorprendentemente a los jóvenes reunidos para el evento “Hope Happening” en la Expo de Bruselas, un edificio cerca del Estadio Rey Balduino, para esperar la celebración con el Pontífice cantando, bailando, rezando y acampando para pasar la noche. “Os hago una pregunta: ¿sabéis lo que hacen los jóvenes? ¡Los jóvenes hacen ruido! Os doy un consejo: adelante. Haced ruido, tened siempre en la memoria al Señor y la memoria con la oración”, les dijo. Para los jóvenes de las realidades salesianas, fue una alegría ver al Papa saludar dos figuras de San Juan Bosco y Santa María Mazzarello, que subieron al escenario para hacerse una selfie con él.

La historia de Merveille, que estuvo presente: “El sábado viví un momento extraordinario, una experiencia única en la vida: el encuentro con el Papa. Es difícil expresar con palabras la emoción que sentí en ese momento. Estar en presencia de una personalidad tan importante para tantos en todo el mundo y para la Iglesia, sentir su benevolencia y humildad, me conmovió profundamente. Este tipo de evento solo ocurre una vez en la vida, y me siento increíblemente afortunado de haber tenido esta oportunidad. Este encuentro quedará grabado en mi memoria, no solo por la importancia del Papa, sino también por la alegría y la paz interior que me ha aportado”.

Y finalmente el testimonio de Ann Charlotte: “Tuve la oportunidad de participar en el festival Hope Happening en Bruselas, organizado con motivo de la visita del Papa Francisco a Bélgica. Fue una experiencia maravillosa, llena de emociones y oración. Tuvimos la suerte de participar en varios talleres y conciertos. El Papa nos dio una gran sorpresa el sábado por la noche. Nos alegró verlo de cerca y en la sala principal. Es realmente un gran hombre, con una gran sonrisa en su rostro, que habla desde el corazón y toca el corazón de los jóvenes. Qué maravilloso momento fue asistir a la misa del domingo con el Papa Francisco en el Estadio Rey Balduino, con cuarenta mil personas unidas en torno a Cristo: una verdadera bendición. Son momentos que quedarán grabados para siempre en nuestra memoria y que marcarán el corazón de los jóvenes católicos belgas“.

2 COMENTARIOS

  1. It is lovely to hear the responses and reactions of those who experienced the joy of the Pope’s visit and words.
    However, it is good to remember the courage and commitment of the students of the Catholic University of Louvain who made an impassioned plea to Pope Francis for the church to change its view of women.
    “Women have been made invisible. Invisible in their lives, women have also been invisible in their intellectual contributions,” the students said.
    “What, then, is the place of women in the church?” they asked. “We need a paradigm shift, which can and must draw on the treasures of spirituality as much as on the development of the various disciplines of science.”

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