Noticias de Sudan

Karthoum (Sudán). La Madre General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, Sor Chiara Cazzuola, hoy, 11 de noviembre de 2023, recibió una llamada telefónica de la Comunidad FMA de Karthoum, en Sudán, cuya casa fue alcanzada, el 3 de noviembre, por una gran bomba de guerra.

Fue una gran sorpresa, porque es difícil para ellas encontrar el momento favorable para la conexión. Las hermanas relatan que, gracias a Dios, están bien, aunque todo alrededor de su casa ha sido bombardeado, por lo que es difícil ver dónde están. Mientras que desde el interior de la casa no percibieron inicialmente la gravedad de lo sucedido, la gente desde el exterior vio los daños que habían sufrido con el bombardeo y acudió a ver si las hermanas estaban vivas, si estaban bien y si necesitaban algo.

Las hermanas agradecen tanto al Instituto por la cercanía, la oración y por la posibilidad de permanecer en ese lugar en esta dramática situación, porque ellas son la única esperanza de la gente que repite: “Mientras estén ustedes, nosotros tenemos esperanza, ¡no nos abandonen también ustedes!”.

Esta mañana, durante la llamada telefónica, se escuchaban llorar los niños, que hoy eran unos cincuenta, junto con las madres y mucha gente pobre. Las hermanas acogen a todos, hasta el punto de no saber cuántas personas tienen en casa.

La Madre asegura la oración y la preocupación de todas las Comunidades del mundo y agradece a la Comunidad de S. Egidio que, como en otras ocasiones, se ha hecho disponible para comunicarse con la Cruz Roja Internacional para que se ponga en contacto con la Comunidad FMA. Pero también la gente del lugar es buena y generosa, hasta el punto de matar a una oveja para donar 5 Kg de carne, que viene dividida en trozos para que baste para todos.

El padre Jacob intentó una videollamada, que duró el tiempo justo para permitir que la Madre viera los rostros serenos de las hermanas. Luego no fue posible ninguna conexión. Toda la comunidad está contenta de quedarse en el lugar.

La Madre está preocupada también por la lejanía y la dificultad de comunicación, pero la reconforta la probada confianza de las hermanas en María Auxiliadora, que siempre sigue protegiéndolas, y pide a todas las FMA del Instituto y a las Comunidades Educativas que sigan implorando su poderosa intercesión por la paz en Sudán y en todas las naciones del mundo desgarradas por los conflictos.