Roma (Italia). El 25 de enero de 2025, a principios de año celebrando el 10º aniversario de la Encíclica Laudato Si’ sobre el cuidado de nuestra casa común – firmada por el Papa Francisco el 24 de mayo de 2015 – y el 800 aniversario del Cántico de las Criaturas de San Francisco de Asís, el Movimiento Laudato Si’ organizó una vigilia contemplativa online de 10 horas, 1 hora para celebrar cada año de la Encíclica.
Los objetivos de la vigilia fueron: poner de relieve el significado de la contemplación cristiana en la lucha contra la crisis ecológica y climática, a la luz del 10º aniversario de la Laudato Si’; cultivar un espacio compartido de comunión en el que las personas de todo el mundo puedan reunirse en la contemplación y expresar su preocupación por el progreso del planeta; Fortalecer la relación entre las redes y comunidades comprometidas con el cuidado de la creación, para colaboraciones a largo plazo.
Para preparar esta vigilia, se animó a los facilitadores participantes a recurrir a su propia tradición, utilizando música, imágenes, reflexiones guiadas o simplemente el silencio. La intención fue la de crear un espacio para rezar desde el corazón, en unión con todos los participantes online, que eran unos 230.
Para simbolizar el Espíritu de Pentecostés presente en el encuentro mundial, se optó por no proporcionar traducción simultánea, dejando la variedad de idiomas e invitando a «sentarse» en contemplación y unidad en momentos en que se hablaban idiomas distintos al propio.
Se había pedido a la Comisión de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC) de las Uniones Mundiales de Superioras Generales USG y UISG que dirijiera la vigilia desde las 18:00 a las 19:00 hrs.(horario de Roma). El servicio fue realizado por algunos miembros del grupo de trabajo del sector religioso para la Plataforma de Acción Laudato Si’, entre ellos Sor Chanda Constance Nsofwa, Hija de María Auxiliadora, colaboradora del Ámbito para la Pastoral Juvenil y representante del Instituto FMA en este sector.
Los religiosos y religiosas dirigieron el momento de oración, comenzando con una reflexión titulada «El libro de la creación», seguida de una invitación a orar, contemplar y actuar frente a los desafíos del mundo. El momento terminó con la lectura del n° 224 de Laudato Si’: «La desaparición de la humildad, en un ser humano desaforadamente entusiasmado con la posibilidad de dominarlo todo sin límite alguno, sólo puede terminar dañando a la sociedad y al ambiente. No es fácil desarrollar esta sana humildad y una feliz sobriedad si nos volvemos autónomos, si excluimos de nuestra vida a Dios y nuestro yo ocupa su lugar, si creemos que es nuestra propia subjetividad la que determina lo que está bien o lo que está mal.”
Los participantes online se involucraron en el momento de oración y se les invitó a expresarse en el chat anotando una palabra o expresión específica que les llamara la atención, a entrar en diálogo con Dios sobre las palabras leídas, a escuchar y estar abiertos a lo que Él pudiera sugerirles a través de ese pasaje de LS, a permanecer en silencio y a dejarse habitar por la presencia de Dios en ese momento.
Con la resolución del Capítulo general XXIV, el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora ha decidido implicar a todo el Instituto en un camino concreto y continuo de conversión a la ecología integral, retomando los siete objetivos de Laudato si’ online, en el espíritu del Sistema Preventivo.
Para las FMA y para las Comunidades Educativas, la experiencia de la vigilia contemplativa sobre la Laudato Si’ forma parte de la asunción concreta del compromiso de enseñar a las generaciones más jóvenes la actitud contemplativa, de cuidar la casa común.
El Papa Francisco en su catequesis del 16 de septiembre de 2020 sobre el tema «Sanar el mundo: cuidado de la casa común y actitud contemplativa» enseña que «la contemplación, que nos lleva a una actitud de cuidado, no es mirar la naturaleza desde fuera, como si no estuviéramos inmersos en ella. Pero estamos dentro de la naturaleza, somos parte de la naturaleza. Más bien, se hace empezando desde dentro, reconociéndonos como parte de la creación, haciéndonos protagonistas y no meros espectadores de una realidad amorfa que solo sería cuestión de explotar.
Quienes contemplan de esta manera sienten asombro no solo por lo que ven, sino también porque se sienten parte integral de esta belleza; Y también se sienten llamados a custodiarla, a protegerla. Quien no sabe contemplar la naturaleza y la creación, no sabe contemplar a las personas en su riqueza. Y los que viven para explotar la naturaleza, terminan explotando a las personas y tratándolas como esclavos. Esta es una ley universal: si no sabes contemplar la naturaleza, te será muy difícil contemplar a las personas, la belleza de las personas, a tu hermano, a tu hermana.
En esta perspectiva, la contemplación nos permite comprender y habitar más plenamente nuestro papel en la creación. Ofrece un espacio de oración para proteger nuestra casa común. Nos ayuda a enfrentar el presente con conciencia y amor«.
Es una invitación a promover «un nuevo estilo de formación, a todos los niveles, a partir de la experiencia de vida, creando caminos orientados a formar personas abiertas y flexibles, abiertas al cambio, capaces de generatividad y cuidado». (Primera opción CGXXIV).